Para detener la expansión de la Fiebre del Nilo es de vital importancia el control del mosquito Culex Pipiens, trasmisor del Virus del Nilo Occidental.
Conociendo el ente que trasmite una enfermedad viral no es complicado detener su avance cuando se trabaja bien, de forma coordinada y organizada.
El control de este vector trasmisor del Virus del Nilo Occidental se basa fundamentalmente en evitar su reproducción. Una hembra del mosquito Culex Pipiens puede poner unos 1000 huevos.
Imagine una población de 1000 hembras poniendo 1000 huevos en una zona determinada con las condiciones de agua para su desarrollo. Si solamente salen a volar 300 hembras de cada 1000 huevos tendremos 300 mil futuras reproductoras más.
¿Cómo se puede controlar las poblaciones del Mosquito Culex?
El preciso control de las hembras ponedoras de mosquito Culex Pipiens, agente trasmisor del Virus del Nilo, disminuye la expansión de la enfermedad a la mínima expresión.
Es casi inevitable erradicar por completo una especie de insecto sin afectar a otros, pero es factible bajar su población y alejar de los humanos las grandes masas de ellos.
Si no hay agua estancada con alimentos para las larvas, no hay reproducción, pero el agua se necesita para la vida de todos. Las plantas siempre van a estar en los estanques, pantanos y charcos.
No se puede contaminar el agua con químicos que afecten a otras especies y al hombre. Pero existen enemigos naturales que limitan las poblaciones de larvas en las aguas.
Muchos peces se alimentan de larvas de mosquitos y el Guajacón cubano (Cubanichthys cubensis) es uno de ellos. Los he visto en el arroyo artificial del Parque del Príncipe en Cáceres.
Esos peces son muy efectivos contra las larvas de los mosquitos pero necesitan piedras en las orillas bajas donde poder guarecerse de otros peces.
Limpiar las orillas de pantanos, charcas y remansos de arroyos de vegetación facilita el trabajo de los peces que se alimentan de larvas de mosquitos transmisores de enfermedades.
Además de los peces larvífagos existen productos biológicos para el control de las larvas del mosquito Culex y otros como el Aedes.
El Bacillus Thuringiensis Israelensis es una bacteria que realiza un excelente control en las poblaciones del mosquito Culex y otros sin dañar el medio ambiente.
Personalmente usaba soluciones acuosas de Bacillus Thuringiensis Israelensis para aplicar mediante mochila de aspersión en toda el área de la pequeña finca que tenía en Cuba.
Las inspecciones eran constantes para controlar el mosquito Aedes Aegypti, trasmisor del virus del dengue y otras enfermedades. En mi territorio jamás encontraron focos de trasmisión porque, si encontraban larvas, estaban todas muertas.
¿Cómo se debe aplicar el Bacillus Thuringiensis Israelensis para el control de las larvas del Culex?
Como decía, aplicaba mediante aspersiones soluciones acuosas de esa bacteria. Lo hacía en toda la finca pues el mosquito hembra pone hasta en lugares húmedos cuando no encuentra agua.
Cualquier oquedad que acumule agua es suficiente para la puesta de mil huevos de mosquitos Culex. Existen plantas que acumulan agua entre sus hojas y como el ciclo que va desde la etapa de huevos a mosquito es tan corto, hay lugar a su desarrollo.
Por eso se debe aplicar también el Bacillus Thuringiensis Israelensis en plantas, superficies cubiertas por la yerba, aguas estancadas, oquedades y donde quiera que se sospeche agua por muy poca que sea.
Existen disoluciones concentradas de esa bacteria que pueden ser distribuidas entre la población y orientar y educar su uso. Al ser inocua al ser humano no hay riesgo de accidentes.
La aplicación del Bacillus Thuringiensis es sencilla, fácil y segura. Su producción es muy barata así como su distribución que no requiere de condiciones complejas para su conservación.
El control del mosquito Culex, trasmisor del virus del Nilo Occidental, es tarea de todos en España.
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